Las «joyas botánicas» de la Ribera y la Murta llenan la Casa de la Cultura para sensibilizar sobre su valor y su estado de fragilidad

• Ayer se inauguró la exposición «Joyas botánicas de la Ribera», del profesor de Botánica y artista Stübing
• Salvador Iñigo expondrá más de 60 fotografías de «Flores de la Murta» del 23 de noviembre al 9 de diciembre

La Ribera alberga joyas botánicas que ahora se pueden contemplar como joyas artísticas a través del filtro del profesor de Botánica y graduado en Bellas artes, Gerardo Stübing. La Casa de la Cultura de Alzira acoge hasta el 4 de diciembre la exposición «Joyas Botánicas de la Ribera y alrededores», un trabajo impulsado por la Mancomunitat de la Ribera Alta, el Vicerrectorado de Proyección Territorial y Sociedad de la Universitat de València y la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, donde el artista Stübing presenta una serie de trabajos realizados con varias técnicas artísticas que tienen como base la fotografía y como elemento común la utilización de las plantas autóctonas de la comarca con el fin de sorprender el espectador.

La exposición, abierta hasta el 4 de diciembre, consta de obras únicas inspiradas en la flora autóctona del territorio realizadas sobre varios sopòrtes y con varias técnicas. Acerca al público en general la riqueza botánica de nuestro territorio «y, sin duda, es una forma de conocer nuestro patrimonio, de ser conocedores de toda la riqueza botánica que nos rodea y, en definitiva, de acercarnos a nuestra comarca», indica el presidente de la Mancomunitat de la Ribera Alta, Txema Peláez, en el catálogo de la exposición (https://mobiroderic.uv.es/handle/10550/80647).

En la muestra se pueden ver imágenes de endemismos de la Ribera, como el gordolobo valenciano (Verbascum fontqueri) o los anteojos de Cullera (Biscutella riberensis), y también especies compartidas con comarcas próximas, como el rabo de gato rosado (Sideritis regimontana subsp. edetana), la tramussera valenciana (Lupinus mariae-josephae) o la saladina (Limonium dufourii). La Ribera es también territorio de acogida de docenas de especies singulares de distribución más amplia, incluyendo plantas que solo se conocen aquí para todo el territorio valenciano, como la malva arborescente (Lavatera olbia) en Llaurí, y plantas acuáticas raras y de distribución muy limitada, como el nenúfar silvestre (Nymphaea alba), que vive en algunos de los manantiales de la Albufera. La diversidad del paisaje también la ha convertido en «refugio de algunas de las especies valencianas más amenazadas, como la orquídea Anacamptis papilionacea subsp. grandiflora en Sumacàrcer, la lengua de ciervo sagitada (Phyllitis sagittata) en Cullera, o el helecho acuático (Thelypteris palustris) en el río Verde en Benimodo».

La exposición es una ocasión única de adentrarse en toda esta riqueza botánica de la comarca a través de la obra de Stubïng, que hace de ilustrador botánico, a medio camino entre el arte, la ciencia y la técnica, e hibrida pintura, grabado y fotografía, reinterpretando técnicas antiguas. La muestra tiene como objetivo, dice el autor, «sensibilizar al observador en el aprecio y respeto por nuestro entorno natural, protegemos aquello que queremos, pero para querer algo o a alguien previamente tenemos que conocerlo».

En este sentido, lo obra Maig 2050 «es el barco insignia de la exposición y la propuesta»: denuncia la pérdida de biodiversidad ligada a las actividades humanas y al cambio climático. Y es que, recuerda el catálogo, según la ONU cada día desaparecen entre 100 y 300 especies de plantas, animales y microorganismos, de forma que una cuarta parte de las especies actuales se extinguirán en los próximos 20 a 30 años. «Es posible que, al menos cuatro de las especies representadas en Maig 2050, como consecuencia fundamentalmente del cambio climático, puedan desaparecer en los próximos 30 años, aunque lleven en el planeta más de 100 millones de años frente a los poco más de 300.000 años de existencia que tiene la especie humana». El trabajo de Stübing muestra el patrimonio actual de la Ribera, y deja también una pregunta: «¿Será el mismo patrimonio de aquí a 20, 40 o 50 años? ¿Cómo cambiarán nuestros paisajes en las próximas décadas? ¿Cómo afectarán factores como el cambio climático?». La exposición hace reflexionar a los visitantes sobre estos aspectos y concienciar del peligro que corre nuestro patrimonio natural y que hay que cuidarlo y preservarlo.

Divulgar el rico patrimonio botánico con visitas guiadas a escolares
Esta «preciosa exposición» se complementará la semana que viene, anuncia el regidor de Cultura, Alfred Aranda, con la muestra «Flores de la Murta», una compilación de más de 60 fotografías realizadas por el alcireño Salvador Iñigo, apasionado de la botánica y de las montañas, que ofrecerá el martes 23 a las 20 horas la conferencia «El Valle de la Murta y su flora», que servirá para inaugurar la exposición. Se trata de una iniciativa de la Concejalía de Medio Ambiente y la Associació Mediambiental Murta i Casella y, precisamente, miembros de esta asociación serán los encargados de guiar la visita de los escolares de los centros educativos interesados a través de las dos muestras. La Concejalía de Cultura de Alzira invitará los colegios e institutos a visitar las dos exposiciones, «una ocasión excepcional para conocer esta tarea de divulgación y de sensibilización sobre la riqueza botánica, y valorar la importancia de mantenerla y de evitar la extinción de esta flora que es necesaria para el ecosistema de la comarca», dice Aranda.