Se ha instalado el tercero y último panel conmemorativo de los 500 años del cultivo del naranjo en la ciudad de Alzira. Un plafón cerámico que representa dos labradores recogiendo naranjas del campo para ser transportadas en carro hasta un almacén, con la inscripción «Alzira y la naranja, 1517-2017».
La ubicación escogida ha sido la plaza de Corbeil Essonnes, «un lugar con mucha visibilidad, puesto que está situada en la entrada principal en la ciudad», ha declarado Isabel Aguilar, regidora de Patrimonio Cultural del Ayuntamiento de Alzira.
Con esta colocación se completa la trilogía iniciada en mayo del 2018, a raíz de instalar el primero de los paneles en la avenida de los Santos Patronos, a la altura de la parada de taxis y con una imagen del antiguo puente de San Bernat acompañada por el lema «Alzira. Origen, patria y lonja de la naranja y su comercio. 1517-2017». El segundo de los retablos cerámicos se ubicó en el parque Pere Crespí, en octubre del 2018, dedicado a las mujeres que trabajaban manipulando las naranjas en el almacén para la exportación, y con la misma inscripción que el anterior.
«Alzira rinde así homenaje a todas y todos a los que a lo largo de 500 años han dedicado su vida al cultivo de la naranja, una práctica arraigada en nuestra ciudad a lo largo de siglos, y aunque en la actualidad ya no sea el principal motor de la economía local ha sido determinante a lo largo de la historia, por eso merece un homenaje permanente con la instalación de estos tres paneles que además pasan a formar parte del patrimonio cultural de nuestra ciudad», según la regidora.
El ceramista local Xavier Claur ha sido el encargado de realizar los tres paneles que contribuyen a difundir a los vecinos y visitantes la relevancia de Alzira en el cultivo del naranjo, lo cual tiene su precedente en las décadas de los 60 y 70 cuando en la entrada de la población se anunciaba el importante vínculo de la naranja con la ciudad.