Alzira, 22 de febrero de 2018.- Ante un nutrido público congregado en el MUMA, ayer Ana Rosa Ballester Bonilla hizo pública la donación al pueblo de Alzira de la imagen que hizo su padre, el artista Antonio Ballester Vilaseca. Uno de los artistas valencianos más prestigiosos de España en el siglo XX, que, como dijo en el discurso de presentación la vicealcaldesa y concejala de Patrimonio Cultural, Isabel Aguilar, fue uno de los artistas valencianos que debieron salir, a la fuerza, de su tierra, hacia un injusto exilio, solo por el hecho de implicarse en defender una España mejor, social y cultural para todos. 

Entre el público asistente había representación de diferentes asociaciones, así como el presidente de la Junta de Hermandades y Cofradías de la Semana Santa de Alzira, Vicente Fábregues, ya que algunos de los pasos procesionales son obra de Ballester, como la Oración de Jesús en el Huerto; el Cristo yacente del Santo Sepulcro; o el Cristo en el Gólgota; motivo por el que también acudieron los presidentes y miembros de las respectivas cofradías: Enrique Sifre y Francis Luis, o de imágenes como Nuestra Señora del Lluch, patrona de la ciudad, representada por su presidente Javier Andújar; y otros obras como la Inmaculada de Santa Catalina, representada por Enrique Masiá.

A todas estas obras, Ana Rosa Ballester añadió una imagen en bronce de Vicente Blasco Ibáñez, y ahora la figura de La Muchacha en el lago, ambas para ser expuestas en el MUMA, donde también se conserva la imagen en yeso de Santa Gracia, que hizo junto a Elias Cuñat para esculpir la figura pétrea de la hermanita y ubicarla en el casalicio del Puente de Sant Bernart.

Un acto muy emotivo donde Alzira demostró una vez más, en la persona de Ana Rosa, el aprecio que profesa a la obra de Ballester.

En palabras de Aguilar: «La obra de Ballester en Alzira será por siempre apreciada por unos, adorada por otros y estimada por todos».

Por su parte el alcalde, Diego Gómez, reconoció también en su discurso la gran aportación artística de Ballester a la ciudad de Alzira, tanto en su obra de imágenes religiosas como en su obra civil. Para el alcalde, «la obra de La Muchacha en el lago es una escultura de libertad que llenará nuestro museo acompañando a otras obras del bienquerido Tonico Ballester».

Alzira, 22 de febrero de 2018.- Ante un nutrido público congregado en el MUMA, ayer Ana Rosa Ballester Bonilla hizo pública la donación al pueblo de Alzira de la imagen que hizo su padre, el artista Antonio Ballester Vilaseca. Uno de los artistas valencianos más prestigiosos de España en el siglo XX, que, como dijo en el discurso de presentación la vicealcaldesa y concejala de Patrimonio Cultural, Isabel Aguilar, fue uno de los artistas valencianos que debieron salir, a la fuerza, de su tierra, hacia un injusto exilio, solo por el hecho de implicarse en defender una España mejor, social y cultural para todos.

 

Entre el público asistente había representación de diferentes asociaciones, así como el presidente de la Junta de Hermandades y Cofradías de la Semana Santa de Alzira, Vicente Fábregues, ya que algunos de los pasos procesionales son obra de Ballester, como la Oración de Jesús en el Huerto; el Cristo yacente del Santo Sepulcro; o el Cristo en el Gólgota; motivo por el que también acudieron los presidentes y miembros de las respectivas cofradías: Enrique Sifre y Francis Luis, o de imágenes como Nuestra Señora del Lluch, patrona de la ciudad, representada por su presidente Javier Andújar; y otros obras como la Inmaculada de Santa Catalina, representada por Enrique Masiá.

 

A todas estas obras, Ana Rosa Ballester añadió una imagen en bronce de Vicente Blasco Ibáñez, y ahora la figura de La Muchacha en el lago, ambas para ser expuestas en el MUMA, donde también se conserva la imagen en yeso de Santa Gracia, que hizo junto a Elias Cuñat para esculpir la figura pétrea de la hermanita y ubicarla en el casalicio del Puente de Sant Bernart.

Un acto muy emotivo donde Alzira demostró una vez más, en la persona de Ana Rosa, el aprecio que profesa a la obra de Ballester.

 

En palabras de Aguilar: «La obra de Ballester en Alzira será por siempre apreciada por unos, adorada por otros y estimada por todos».

 

Por su parte el alcalde, Diego Gómez, reconoció también en su discurso la gran aportación artística de Ballester a la ciudad de Alzira, tanto en su obra de imágenes religiosas como en su obra civil. Para el alcalde, «la obra de La Muchacha en el lago es una escultura de libertad que llenará nuestro museo acompañando a otras obras del bienquerido Tonico Ballester».