El curso ha sido impartido por una miembro del colectivo Punto 6, cooperativa de arquitectos, sociólogas y urbanistas de procedencias diversas, con más de 10 años de experiencia local, estatal e internacional sobre urbanismo feminista para la vida cotidiana.
El curso consistía en una parte teórica donde la ponente explicaba los aspectos a considerar para tener una ciudad más equitativa en aspectos como la iluminación, el mobiliario urbano o la accesibilidad, entre otros. La vertiente práctica consistía en hacer varios grupos de trabajo para detectar, sobre un plano de Alzira y basándose en la teoría explicada antes, las faltas en diferentes puntos de la ciudad en esta materia.
La concejala de Servicios Sociales y Políticas de Igualdad, Marina Mir, «valora el curso de manera positiva porque la igualdad debe ser una materia transversal y tenida en cuenta en el día a día. Para conseguir ese objetivo, es muy importante trabajarla desde diferentes ámbitos municipales. Al mismo tiempo, cumplimos uno de los objetivos de la Red de Municipios Protegidos contra la Violencia de Género impulsada por la Diputación de Valencia que dice que por lo menos un 10 % de la plantilla municipal debe tener formación en igualdad».