Aprobada por el plenario del ayuntamiento el día 30 de junio por todos los grupos con el voto negativo del partido político de extrema derecha.

Es necesario el reconocimiento a todos aquellos sectores vinculados a las luchas sociales, para ser los y las máximas responsables de que ahora mismo existan ciertos derechos reconocidos en las personas LGTB+ y la existencia de iniciativas de las varias administraciones, desde el ámbito municipal al europeo que tienen como objetivo un compromiso con la lucha colectiva por la igualdad y la libertad de toda la ciudadanía.

Esta Ley pretende superar la histórica invisibilidad y falta de reconocimiento de los derechos de las personas lesbianas, gays, bisexuales, transexuales, transgénero e intersexuales. La misma atiende y respeta todas las identidades posibles, dado que el colectivo LGTB+ no es un todo homogéneo. realidades diferentes y situaciones diferentes. Conviene tener presente la especial vulnerabilidad de las personas LGTB+ de avanzada edad, o las personas migradas o solicitantes de asilo, las que están privadas de libertad, las que se dedican al trabajo sexual, las menores y adolescentes, las persones víctimas de discriminación múltiple, como las mujeres transexuales y transgénero, o las personas bisexuales, invisibilizadas hasta la fecha.

Por eso, este año la Federación Estatal LGTB ha declarado el 2020 como año temático «Mujeres LTB: Sororidad y Feminismo», para visibilizar la realidad de estas mujeres y denunciar la opresión de género que viven debido a la suma de discriminaciones que sufren para ser, además de mujeres, parte del colectivo LGTB+ y estar expuestas tanto en el machismo y la misoginia como la lesbofobia, transfobia y bifobia.

Desde las instituciones tenemos que seguir trabajando en favor de la igualdad legal, social y de facto entre todas las personas. Hay que impedir que las convicciones morales o ideológicas individuales sigan posando trabas el avance de la igualdad, que es el camino de la democracia. A pesar de que la igualdad legal es ya una realidad generalizada, la igualdad social y real del colectivo LGTB+ es todavía una asignatura pendiente que hay que abordar con urgencia y decisión. Es precisamente ahora cuando los gobiernos tienen que mantener firmes en el estado de derecho y los derechos humanos. Igualmente, hay que seguir denunciando que todavía a día de hoy, más de 70 países tienen legislaciones que persiguen a las personas LGTB+ y que en 10 de ellos se las condena a muerte. Reiteramos la importancia de denunciar esta situación y de luchar por los derechos de todas las personas, desde la perspectiva que la lucha por los derechos LGTB+ es la lucha por los derechos humanos.

Los municipios son los espacios más próximos a la ciudadanía, los cuales juegan un papel fundamental en la visualización del colectivo LGTB+, siente un referente de integración y lucha contra la discriminación. Por eso es necesario nuestro compromiso al dar respuesta en la población LGTB+ en todo aquello que sea de nuestra competencia.

Porque LGTBfòbia, lejos de desaparecer, continúa manifestándose en aulas, hogares, los centros de ocio y de trabajo, a los deportes, e incluso, a las administraciones y servicios públicos.

Estas actitudes, como vemos, son más acusadas en tiempos de crisis sanitaria, económica y social, donde los derechos de todas las personas, y especialmente, las más estigmatizadas socialmente, son vulnerados de manera constante. De nuevo, este 28 de junio, es necesario un apoyo explícito a las demandas y necesidades de la población LGTB+.

Por lo tanto, si bien hay que reconocer la existencia de iniciativas de las varias administraciones, de las municipales en la Generalitat, el Estado o la Unión Europea, que tienen como objetivo un compromiso con la lucha colectiva por la igualdad y la libertad de toda la ciudadanía, es cierto que todavía queda mucho de trayecto para llegar a ser una sociedad donde no se producia ningún tipo de discriminación por motivo de sexo, identidad de género u orientación sexual. Celebramos los avances, sin olvidar que queda mucho de camino para recorrer.

Por todo esto, presentamos al Pleno del Ayuntamiento de Alzira la propone de adopción de los siguientes ACUERDOS:

PRIMERO.- Realizar una denuncia explícita contra la homofobia, lesbofobia, bifobia y transfobia, así como expresar un compromiso conciso de arranque de medidas para erradicar esta lacra social. Como muestra pública y visible, con motivo del 28 de junio colgaremos al balcón del ayuntamiento la bandera arco iris del movimiento LGTB+.

SEGUNDO.- Continuar trabajando y poniendo en marcha medidas desde el Ayuntamiento para promover el respeto y erradicar esta lacra social.

TERCERO.- Reivindicar una educación pública, laica, de calidad y que atienda a la diversidad como requisito para crear un espacio educativo donde imperan los valores democráticos y de tolerancia, donde se incluya la defensa de la diversidad familiar y la lucha contra cualquier tipo de discriminación que puedan sufrir las familias homoparentals, tanto material como simbólica.

CUARTO.- Expresar un compromiso efectivo contra los recortes sociales, especialmente la prevención y el tratamiento del VIH.

QUINTO.- Solicitar en el Gobierno del Estado la despatologización de las identidades trans e intersexuales, sin que los derechos sexuales y sanitarios de estas personas se vean perjudicados.

SEXTO.- Solicitar en el Gobierno del Estado la aprobación de la Ley integral LGTBI+ que incluya la prohibición de las llamadas terapias de reversión y que sea efectiva para erradicar todas las formas de discriminación hacia las personas transexuales en todos los ámbitos.

SÉPTIMO.- Instar en el gobierno de la Generalitat y de España, a impulsar y fortalecer un marco integral legislativo y político que erradico los discursos y los delitos de odio para garantizar la protección de los derechos y libertades de todas las personas, con independencia de sus circunstancias personales o sociales, y sobre incidiendo en grupos de especial protección.

OCTAVO.- Esta moción se hará llegar a los grupos políticos de las Cortes Valencianas, a la Presidencia del Gobierno central y al Ministerio de Igualdad.