Alzira, 3 de junio de 2019.- Hacia las 9 de la mañana del sábado 1 de junio, una mujer llamó a la Policía Local de Alzira para manifestar que había sido amenazada de muerte y agredida por su pareja de origen polaco.

Afortunadamente, la mujer logró huir y abandonar la casa junto con sus hijos menores de edad. Asimismo, la víctima manifestó que su agresor le decía que iba a suicidarse y le estaba enviando fotos que lo mostraban con cortes en los brazos y un gran charco de sangre.

Inmediatamente los agentes se personaron en el domicilio de la pareja, donde, cuando llegaron los policías la mujer los esperaba en el portal de la finca, con evidentes síntomas de nerviosismo y ansiedad.

La víctima facilitó a los agentes una llave de la vivienda que compartía con el presunto agresor para que pudieran socorrer a su pareja, pero resultó imposible abrir la puerta ya que se encontraba cerrada por dentro. Después de llamar en repetidas ocasiones a la puerta y al timbre sin obtener respuesta, y ante el peligro y la posibilidad de que estuviera gravemente herido, la mujer autorizó la entrada a la vivienda por la fuerza. Los agentes se encontraron con una barricada construida con el mobiliario de la casa y al presunto agresor en el suelo en medio de un gran charco de sangre.

Cuando el hombre vio la Policía Local, se levantó y se dirigió a la cocina, y volvió a poner otra barricada con la nevera y otros utensilios.
Empezó en ese momento un episodio tenso con una actitud muy agresiva con los agentes, a los que insultó y amenazó desde el inicio. Ante esta actitud y los obstáculos físicos interpuestos por el agresor, los agentes se vieron obligados a hacer uso de la pistola Taser para reducirlo, inmovilizarlo y detenerlo.

Tras ser detenido, fue asistido por los sanitarios presentes en el lugar, quienes le administraron tranquilitzantes y le hicieron una primera cura de las heridas, para trasladarlo posteriormente al hospital. También recibió asistencia sanitaria un agente al que el agresor le lanzó el frigorífico, que le causó lesiones en un codo y un corte en una pierna.

La mujer recibió de manera inmediata asistencia sanitaria y asesoramiento profesional y ya ha tramitado la denuncia a su pareja, que ya tiene una orden de alejamiento como medida cautelar.

El año 2019, la Policía Local ha practicado 11 detenciones y ha llevado a cabo 33 intervenciones relacionadas en Violencia doméstica y violencia de género.