Alzira, 22 de octubre de 2018 – Un año más, desde la Concejalía de Gestión Urbanística están llevándose a cabo los tratamientos de endoterapia para los pinos de nuestra ciudad con el fin de combatir la plaga del gusano de la procesionaria, un insecto defoliador que crea muchos problemas en las pinadas y en la salud de personas y animales.
Hay que estar informados de que las larvas pasan por cinco estadios, y mantienen un comportamiento gregario. A partir del tercero disponen de unos pelos urticantes o dardos en unas bolsas que sueltan las orugas cuando se sienten amenazadas y que liberan histamina. Seguidamente, son depositadas dentro de unas bolsas en los pinos y, tras alimentarse durante el día, acuden al árbol por las noches. Es en esta fase cuando tiene lugar la formación de la bolsa de manassos o nidos de invierno y, por tanto, el emplazamiento definitivo de la colonia.
Durante el 4º y el 5º estadio hay un aumento tanto de la longitud como del número de pelos urticantes. Cuando las orugas salen del nido para alimentarse durante la noche, van tejiendo sobre los bolsa de manassos.
Hacia el final del invierno, los huevos con las larvas pasan a convertirse en orugas y completan sus 5 estadios de desarrollo larvario. Es en estos momentos cuando bajan en procesión, una detrás de otra por el tronco del pino hasta encontrar un lugar en la arena donde enterrarse para crisalidar y poder convertirse en mariposas, completando cada año el ciclo.
El concejal de Gestión Urbanística, Fernando Pascual, ha manifestado al respecto: «Esta técnica de endoterapia consiste en la realización de varias inyecciones en el tronco, dependiendo de las dimensiones del árbol, el entorno del metro de altura, con unas agujas que van de acuerdo con la estructura y rugosidad de su tronco. En estas inyecciones se introduce la abamectina que circulará por todo el xilema del árbol y llegará a todas sus ramas. Es un tratamiento muy efectivo que reduce el riesgo de plaga.