- La dirección del centro infantil elige al contador de historias por su vinculación con el mundo de la infancia y la educación
- La viuda de Llorenç Giménez, distinguido con la Medalla al Mèrit Cultural por la Generalitat, agradece el reconocimiento de Alzira
La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Alzira aprobó ayer el cambio de denominación de la escuela infantil de primer ciclo «Llepolies» por el de «Llorenç Giménez, contacontes», en homenaje al popular contador de historias de oficio, y maestro de profesión, que falleció el 30 de agosto de 2019. El equipo directivo de la escoleta, que es de titularidad municipal, solicitó modificar el nombre del centro, por considerarlo «inapropiado», «dada la calificación y finalidad del centro según la legislación vigente en atención al nivel educativo y la misma propuesta pedagógica que impregna este ciclo». Como alternativa propusieron el nombre propio de «Llorenç Giménez, contacontes», denominación que consideran «idónea dada la relevancia de la persona y su vinculación con el mundo infantil». Una vez aprobado el cambio de denominación por la Junta de Gobierno, se pondrá en conocimiento del Consejo Escolar Municipal y de la Conselleria de Cultura, Educación y Deporte, que tendrá que emitir informe favorable. El Ayuntamiento de Alzira ha informado de la decisión a su viuda, quien se ha mostrado contenta y ha agradecido el reconocimiento, asegura el alcalde, Diego Gómez.
Maestro, autor de numerosas obras de literatura infantil, galardonado en varias ocasiones por su aportación al mundo literario y a la recuperación de la figura de rondaller. Llorenç Giménez, natural de Alfafar, destacó por su vinculación con el ámbito escolar como cuentacuentos, rescatando historias, cuentos y leyendas de nuestro patrimonio y raíces culturales. Sus historias ilusionaron durante años los niños y las niñas de Alzira, puesto que visitó en varias ocasiones la ciudad para participar en actividades en varios escenarios culturales. Entre su obra escrita destaca Més contes, per favor (2014), Els acudits de Llorenç (2003), El secret de les cinc llegendes (2001), Les endevinalles de Llorenç (1997), y El fantasma dels ulls blaus (1996).
Recibió el premio Empar de Lanuza de literatura infantil, el de la Crítica Serra d’Or de literatura Infantil i Juvenil (1998) y el de la Associació de Biblioteques Valencianes. El 7 de octubre de 2019, la Generalitat Valenciana le concedió la Distinció de la Generalitat al Mèrit Cultural «como reconocimiento a su sensibilidad e ingenio para hacer magia con las palabras, dejando boquiabiertos a niños, niñas y mayores, que disfrutaron del privilegio de escucharlo».
